Relatos Vivant
Las abuelas son mamás con doctorado
Ser madre es uno de los grandes regalos que nos da la vida; pero ser abuela, es volver a ser madre con doctorado: un título otorgado por la experiencia, confianza y el amor infinito hacia los hijos de tus hijos.
Hoy toca hablar de ellas: las abuelas.
En mi caso no tuve la suerte de conocer a ninguna de mis abuelas, pero sí he podido ver cómo mi madre ha conseguido su nuevo cargo de abuela observando cómo ha cuidado a mi hijo, a mis sobrinos y con amor de sobra para seguir cuidando de mi y de mis hermanos (en casa, somos 4)Ella es sabia e inteligente; ella pertenece como muchas otras, a esa generación de mujeres a las que las circunstanciasde la vida, ni siquiera tuvieron opción a aprender a leer y escribir.Eso no fue problema para ella para sacar nuestra familia adelante, organizando pequeñas tareas entre mujeres del barrio para que todas pudieran aportar a sus familias pequeños sueldos trabajando por las tardes, tras las tareas domésticas, cosiendo zapatos en sus casas.
Su experiencia de vida le da una visión, que hace que cada acción que realiza, tenga un propósito por pequeño que sea; siempre hace que las cosas sucedan sin que nos demos cuenta. Mueve los hilos invisibles, siempre en segundo plano, pero a la vez maestra y directora de que todos estemos bajo su cuidado.La vida le ha dado un coraje, y una nueva visión con la que con una mirada, o sólo unas palabras, te soluciona todos los dramones con los que puedas acudir a ella.Estoy muy orgulloso de todos los cargos que sustenta;
Que sea mi madre
La abuela de mi hijo
Abuela de mis sobrinos
Si tienes abuela, aprovecha el tiempo; ¡vívela y disfrútala!Que nunca te quedes con el “tenia que haber dicho o hecho...”Y como calzadordesuenhos@vivant.es , me gustaría proponerte un reto muy sencillo: siempre que hables con ella, dile que la quieres y lo especial que es para ti.¿Y tu?, ¿Vas a probar a decirle “Te quiero”?